- ¿Qué es psicodelia?
Dices mientras arrojas
tus caleidoscópicos ojos
hacia mis desgastadas pupilas.
Y yo digo:
- Una mariposa vuela
a través de un bosque gris,
es la certeza del final.
Y te encoges de hombros
con apabullante inocencia .
Y prosigo:
- Una marea de sentimientos
doblados en sí mismos.
Y me miras con fiereza,
y me dices:
- ¡No te entiendo!
Y replico:
- Es la fiebre del más débil,
la última gota de vida,
¡la más intensa y fugaz!
Un cráter de turbulencias,
una explosión imprevista.
Un sueño que sin soñarlo
se sueña sin desearlo.
¡Una mística visión,
un arrojo equivocado!
Y te ríes,
y al reírte veo la luz:
- ¡Qué es psicodelia!
¿Y tú me lo preguntas?
Psicodelia eres tú.
Llegan
y se van sin hacer ruido
- como buenos
clientes-,
luego el tiempo los confunde
en la memoria,
y ya ni sabes
si aquel lunes era jueves
o al revés.
Que no te engañen,
no son tan poca cosa
como parecen: